Casi 50 años sobre los escenarios avalan a Simple Minds como uno de los grupos más importantes de la historia del pop y del rock.

Antes de que Coldplay se convirtiese en un fenómeno mundial capaz de llenar cualquier espacio que se le pusiese por delante, en décadas anteriores ya hubo otros grupos que realizaban giras por todo el planeta “reventando” estadios. Uno de estos fue Simple Minds, que en la década de los 80 y 90 vivió los años de mayor popularidad, actuando ante millones de personas en los cinco continentes y siendo uno de los protagonistas del legendario concierto Live Aid en 1985.
 


La actuación de anoche formaba parte de “Global Tour 2024”, una gira internacional que al finalizar habrá contabilizado más de un millón de asistentes, y que el público de Starlite Occident disfrutó en un enclave mágico: “Buenas noches, Marbella. Qué gran placer estar aquí una vez más en Starlite Occident”, saludaban. Se trataba de su tercera visita al festival. La banda formó parte de la primera edición de Starlite Occident en 2012, y también diez años después, en 2022.
 
No es de extrañar, entonces, que el público internacional de Starlite Occident se mostrase anoche feliz ante el privilegio de ver actuar a Simple Minds en este festival único, un grupo que forma parte de la historia de la música pop y rock de todos los tiempos y cuyos hits serán recordados durante décadas. Jim Kerr -cantante y líder original de la banda-, Charlie Churchill -guitarra y también fundador del grupo- y el resto de componentes demostraron que la formación escocesa aún tiene mucha música por delante.  
 

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Simple Minds, que comenzaron su andadura en Glasgow en 1977, tocaron temas de algunos de sus últimos discos de estudio como “Direction of the Heart” (2022) o “Walk Between Worlds” (2018). Estas composiciones sonaron más poderosas en directo si cabe, gracias a un excelente grupo de músicos y un cantante apasionado y lleno de garra, Jim Kerr, que siempre supo dominar el escenario a su albedrío. 

El delirio de la noche se desató cuando Simple Minds comenzaron a tocar alguno sus hits más emblemáticos: “Alive and Kicking”, “Dont’ You Forget About Me”, “Promise You a Miracle”, “Someone Somewhere in the Summertime”, “Belfast Child”, “Sanctify Yourself”, “Big Sleep”… Al público, de pie y totalmente entregado, le fue imposible no caer rendido ante temas que forman parte la banda sonora de la vida de millones de personas. 
 
Jim Kerr, que hace años que vive en Sicilia donde regenta un hotel, se mostró tan carismático y cercano como siempre a pesar de sus estatus de estrella absoluta, consciente de la fortuna de contar con un repertorio plagado de clásicos y un grupo excelso. Simple Minds demostraron anoche en Starlite Occident por qué fueron pioneros en convertirse en un “grupo de pop-rock de estadios”.  

Antonio Banderas y Nicole Kimpel disfrutaron de la experiencia Starlite Occident junto a la pareja de empresarios creadores del festival, Sandra García-Sanjuán e Ignacio Maluquer. Cenaron en el restaurante italiano recién inaugurado, Raffaella, y siguieron el concierto desde el palco presidencial. Tras el show, Antonio Banderas saludó y dio la enhorabuena a los artistas en el backstage. 

Tras la emblemática actuación de Simple Minds, en el escenario Sessions se presentaba Yng Lucas. Este artista es uno de los representantes más populares de la, a su vez, exitosa escena del reggaetón mexicano.

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Yng Lucas apareció en el escenario con sus gafas de sol habituales y su pose de “chico malo”, para hacer un repaso de sus temas más populares: “La Santa”, “Tony Montana” o “3PLEX”, una canción creada junto a Enrique Iglesias. Y, por supuesto, no pudo faltar su gran hit hasta la fecha, “La Bebé”, que grabó en 2023 junto a la estrella mexicana Peso Pluma, canción con la que ha alcanzado la fama internacional y más de un billón de reproducciones en Spotify. 
 
Starlite Occident transformó su espacio Sessions en un gran club nocturno al aire libre. Naturaleza, innovación y música de vanguardia se unieron en el espacio más atrevido del festival para bailar hasta el amanecer. Rodeado de estrellas y en un ambiente mágico, el público vivió una experiencia divertida y rompedora.

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