Un documental sobre la tauromaquia, una historia sobre la danza o la libertad que había en Torremolinos protagonizan el resto de temas
La cantante, compositora y actriz Beatriz Luengo debuta como directora de cine con el documental ‘Patria y vida: El poder de la música’, basada en la canción que se convirtió en un himno de las protestas de 2021 en Cuba, puesto que denuncia la represión en la Isla y su continua violación de los derechos humanos.
De esta manera, el documental trata sobre la creación de la canción con el mismo nombre por parte de los seis raperos cubanos (Yotuel Romero, Gente de Zona, Descemer Bueno, El Funky y Maykel Osorbo), donde se abren en canal en la lírica y tratan de reivindicar sus derechos humanos.
“La canción se llama ‘Patria y Vida’ y está compuesta por 16 compases que narran el sufrimiento de los que están afuera porque no pueden regresar a su país por orden del régimen cubano. El intenso dolor de un exilio forzado”, ha apuntado Yotuel en la presentación en el Teatro del Soho.
Debido al duro régimen cubano, la canción no solo está prohibida en el país, sino que, además, Osorbo, está condenado en la cárcel y los demás raperos están forzados a un exilio.
‘Es mi primer documental y presentarlo es mi país me hace mucha ilusión, y más cuando voy a contar la historia de mi marido y la de tanta gente de Cuba. Lo importante de esto es tener honestidad y tener una historia por la que luchar’, ha apostillado.
El tema de hip hop que ha dado pie a este documental, que se ha estrenado en el marco del Festival de Málaga, fue galardonado en 2021 con dos Grammy latinos a la canción del año y a la mejor canción urbana.
En cuanto a la Sección Oficial, en la jornada de este martes se ha presentado en el Teatro Echegaray el largometraje ‘Sonoma (Le film, pas le spectacle)’ de Albert Pons y Xavier Lozano, un proyecto que documenta el proceso de creación de la obra de ‘Sonoma’ por la compañía de danza La Veronal a través de grabaciones de vídeo, audio, y pequeñas ficciones inspiradas por el propio proceso de ensayo.
A las 22.00h de la noche y cerrando el ciclo de documentales de la jornada se han proyectado en forma de cortometraje la coproducción española- dominicana con ‘Canto errante’ de Génesis Valenzuela y la producción española ‘Olores’ de Alba Esquinas.
La pieza de Esquinas, de diez minutos de duración, pretende reflejar los sonidos y las imágenes de la infancia de alguien que se siente más cerca de los cuchillos y de los trapos manchados de sangre, que de la pureza con la que se suele concebir la niñez cuando se imagina a unos niños jugando.
Asimismo, señala que lo que le inspiró a llevar adelante este corto fue una foto que encontró en el álbum de su abuela ya fallecida en las que aparecían dos mujeres y un hombre, pero éste último estaba decapitado. ‘Alguien en algún momento recortó la cabeza del hombre que aparece en la imagen y fue ese detalle el que me cautivó e inspiró por completó’, agregaba.
Previo a estos encuentros, en el Auditorio del Museo Picasso, se han llevado a cabo tres proyecciones de la Sección Especial ‘Hotel Torremolinos’ de Sergio Crespo, un documental que reivindica la relevancia histórica de Torremolinos y la Costa del Sol en el contexto del postfranquismo; y ‘Feudo’ de Javi Barón, basado en la pedanía antequerana de Villanueva de Cauche, un núcleo de población que hasta hace poco vivía bajo un régimen feudal en el que los vecinos debían pagar en especie para seguir viviendo en sus casas.
También se ha proyectado ‘La última lidia’ una propuesta de Tomás Ocaña que, por primera vez, reúne a los defensores y a los detractores del mundo del toreo buscando conseguir una fotografía objetiva de la actualidad de la tauromaquia en la España de nuestros días
La trama se sitúa en La Malagueta (Málaga), donde Saúl Fortes y el toro Tabacalero se enfrentan durante los 90 minutos que vertebran el documental. ‘Lo que queremos con el documental es explicarle al público qué es la tauromaquia desde una perspectiva diferente, y en ese viaje nos hemos encontrado a gente muy valiente’, ha señalado Ocaña.
Escritores como Rosa Montero o Mario Vargas Llosa comparten sus visiones antagónicas junto a ganaderos, veterinarios, periodistas, cronistas taurinos y activistas animalistas en un trabajo sin precedentes que persigue de manera equilibrada y objetiva dar voz a todos los puntos de vista y dejar que sea el espectador el que emita sus propios juicios de valor.
‘Lo que me gusta del documental es que todos los protagonistas que salen, a pesar de sus ideas, se comprenden; se tienen que ver con una mente vacía y en blanco y eso permite posicionarte con empatía y respeto’, ha dictado el torero Saúl Torres.